La luz de invierno, a poco buen ojo que tenga uno para aprovecharla, es estupenda. En mi opinión, esa iluminación rebotada, los dos señores de la izquierda (hay dos pináculos arriba a la derecha) y la figurita (persona) al fondo, son los principales valores de esta toma. Un sobrio rincón extremeño, muy bien captado.
Salvador Solé Soriano