Estiró la pata
Un verano, años atrás, encontré el cadáver de esta mosca en casa. Le hice un macro pero, a pesar de conseguir buena iluminación y suficente nitidez, no me acabó de convencer. Pasado el tiempo, recuperé la imagen dándole un tratamiento a base de filtros de Photoshop que me dejó más contento. Por supuesto, este tipo de estética no busca ser “bonita” o “bella”; su propósito es impactar de un modo nada complaciente con los cánones clásicos, emanando de la parte más inconformista y moderadamente cabreada de mi espíritu. Y sin mensaje concreto, lo cual - me consta - lo hace más difícil de digerir.
Cámara Canon Powershot G620 y mucho Photoshop. Datos de la toma perdidos.
Luis Ruiz