El ikebana es el arte floral japonés que distribuye con amor y acierto los tallos de flores y otras plantas, ramas peladas inclusive, en un conjunto que alegra y/o serena la vista. La filosofía estética de esa técnica, con más de 500 años de tradición, bien puede inspirar encuadres fotográficos. En este caso, también la edición colaboró a reforzar el efecto, eliminando todo lo que no fuese el motivo principal. La foto está hecha en Aiguamolls de l´Empordà - Girona (abril 2018) desde el observatorio Quim Franch.
Cámara compacta Canon G1 X MarkII apoyado en ventanilla de observatorio. Iso:100 Exposición (v):1/500 de segundo. Apertura (f):5
Txema Bacaicoa (Colectivo IS)